“… Como todas las Catedrales, son como un microcosmos que reproduce el Reino de Dios, un reflejo del mundo celeste, el lugar privilegiado de la manifestación divina, epifanía del triunfo de Cristo y anuncio de su segunda venida. Siempre, pero especialmente cuando se celebra la liturgia divina, la Catedral es, en frase de San Germán de Constantinopla: «El cielo en la tierra, en el que el Dios supraceleste habita y se pasea»”. (Excmo. y Rvdo. Mons. Sr. D.Juan José Asenjo Pelegrina, Arzobispo de Sevilla. Sevilla, 21 noviembre 2016)… Así la tiene nuestro obispo.